La moneda estadounidense presenta un ajuste que sigue la tendencia sostenida de aumento en los últimos meses, lo que impacta en el poder adquisitivo de los venezolanos
El Banco Central de Venezuela (BCV) publicó el valor de la moneda estadounidense, que el viernes, 1 de agosto, se cotizó en 124,51 bolívares. Este precio representa una variación con respecto a la jornada anterior. Mientras, el valor del euro quedó fijado en 142,73 bolívares.
De acuerdo a la publicación compartida por el ente oficial en sus redes sociales, el precio de la divisa para el lunes 4 de agosto se ubicará en 126,28 Bs y el el valor del euro en 145,88 bolívares.
Este reciente ajuste forma parte de una tendencia sostenida de aumento en la cotización del dólar en los últimos meses, lo que impacta en el poder adquisitivo de los venezolanos. Desde principios de año, la divisa estadounidense ha experimentado un alza significativa, reflejando las presiones inflacionarias.
El incremento constante genera preocupación, pues afecta directamente el costo de bienes y servicios. El BCV interviene en el mercado cambiario para intentar estabilizar el valor de la moneda, pero la depreciación del bolívar sigue siendo una constante en la economía venezolana.
Caída del bolívar frente al dólar
El bolívar cayó en julio un 13,11% frente al dólar en el mercado oficial. La divisa usada en el país suramericano para fijar precios y hacer pagos, comenzó julio con una cotización de 108,97 bolívares en el mercado oficial, lo que significa que, desde entonces, registró un incremento del 15,1%.
Expertos aseguran que el aumento del dólar es una de las principales causas del encarecimiento de bienes y servicios, fijados, en su gran mayoría, con base en la divisa norteamericana.
El BCV no publica cifras de inflación desde octubre de 2024, cuando el país empezó a afrontar nuevamente episodios de devaluación de su moneda frente al dólar.
Además del impacto en la inflación, el incremento de la cotización del dólar también tiene efectos en la capacidad de compra de los trabajadores, sobre todo, de los que cobran sus salarios en bolívares, como los que laboran en el sector público.